¿Sabías que estas figuras eran "queer"?
La construcción de la Sagrada Familia comenzó en 1882. Diseñada por el arquitecto catalán Antoni Gaudí, este emblemático edificio de la ciudad de Barcelona es la mayor iglesia católica inacabada del mundo. Se estima que todos los elementos decorativos estarán listos para 2032, 150 años después del inicio de las obras.
Diseñado a principios de los años 30 cuando Stalin aún estaba en el poder, el ambicioso Palacio de los Sóviets iba a ser un centro político de congresos en el medio de Moscú. La construcción, sin embargo, se vio interrumpida por el estallido de la Segunda Guerra Mundial, tras lo cual el proyecto quedó abandonado. Si se hubiese completado, el edificio se habría convertido en el más alto del mundo (416 m) por aquel entonces.
El Hotel Ryugyong, un enorme rascacielos con forma de pirámide, empezó a construirse en 1987 en la capital de Corea del Norte. Sin embargo, la crisis económica que asoló el país tras la disolución de la Unión Soviética en 1991 truncó el proyecto. A día de hoy, el edificio sigue sin acabar y ha pasado a ser conocido como "El hotel de la fatalidad" fuera de las fronteras coreanas.
A la majestuosa catedral de Siena le falta la extensión de la nave. Las obras se pararon en 1348 a causa de la peste negra que asoló Europa. De hecho, varias paredes incompletas siguen en pie, ya que la construcción nunca se terminó.
Concebido como un monumento en memoria de los soldados escoceses que murieron durante las guerras napoleónicas, el Museo Nacional de Escocia sigue incompleto debido a la falta de financiación. Los fondos se agotaron en 1829.
Aunque por fuera parezca lo contrario, este museo mundialmente conocido no está completo. La parte superior de las columnas está rematada con pirámides de caliza en bruto en lugar de con la piedra tallada que se había previsto inicialmente. Estas esculturas nunca se llegaron a completar debido a la caída bursátil de 1901.
Conocido como la Torre de David en honor a su principal inversor, el ya fallecido David Brillembourg, el Centro Financiero Cofinanzas es un rascacielos abandonado en la capital de Venezuela, Caracas. El interior se encuentra prácticamente vacío desde la crisis económica que el país sufrió en 1991, si bien unos ocupantes ilegales decidieron instalarse en algunas plantas del edificio a principios de los 2000.
Germania era la nueva versión de Berlín que Hitler había imaginado como capital del mundo si los nazis hubiesen ganado la Segunda Guerra Mundial. Albert Speer fue el arquitecto encargado de diseñar el plano, si bien solo se llegó a realizar una pequeña parte del proyecto entre 1938 y 1943. La guerra y la derrota acabaron por sepultarlo para siempre.
Diseñado por nada más y nada menos que el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer, el Centro Internacional de Exposiciones Rashid Karameh empezó a construirse en 1964 y las obras continuaron hasta el estallido de la guerra civil en 1975. En 2018, el edificio fue nominado para entrar en la Lista Indicativa del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Cerca del famoso Qutub Minar de Delhi se encuentra este otro alminar circular menos conocido. Alauddin Khalji, de la dinastía Khalji, fue quien ordenó su construcción en 1311, pero la torre quedó incompleta tras su muerte. Se trata del único monumento sin acabar de la capital india.
La construcción de Prora, lo que iba a ser un complejo hotelero para los trabajadores alemanes en la isla de Rügen, comenzó en 1936, pero para 1939 las obras aún no habían acabado. Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis lo utilizaron como base de entrenamiento y, más tarde, los militares soviéticos hicieron lo mismo. Hoy en día está parcialmente restaurado y funciona como hostal para jóvenes y apartotel de vacaciones.
La magnífica catedral de Estrasburgo es uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica francesa. Lo más increíble de todo es que, a pesar de su grandiosidad, a este templo le falta la torre sur. Esta no se puedo construir después de que las arcas eclesiásticas quedasen vacías.
El rey Luis II de Baviera ordenó la construcción de este increíble palacio en la isla de Herrenchiemsee, la más grande del lago Chiemsee, en 1878. Desde fuera, el edificio parece estar completo, pero por dentro está sin acabar. Tras la muerte del monarca en 1886, no hubo dinero suficiente para rematar la construcción. Tan solo se construyeron 20 habitaciones de las 70 que se habían planeado inicialmente.
La mansión Woodchester es una carcasa del siglo XIX, ya que por dentro faltan plantas y habitaciones enteras. El gasto era demasiado alto, lo que hizo que el edificio quedase incompleto. La única estancia acabada, el salón de dibujo, se puede visitar, pero los únicos residentes permanentes de la mansión son los murciélagos de herradura.
William Kellie-Smith, un ingeniero civil escocés, fue el encargado de encomendar la construcción de este palacio que lleva su nombre en 1915. Por desgracia, murió en 1926 sin poder dejar el dinero suficiente para pagar a los constructores. Por este motivo, su viuda se vio obligada a volver a Escocia y a abandonar la construcción a su suerte. Hoy en día está abierta al público.
Construido en parte como mansión privada para el millonario estadounidense George Boldt, el castillo se quedó a medias en 1904 tras la muerte de la mujer de Boldt. El edificio permaneció abandonado durante 73 años hasta que las autoridades locales decidieron financiar un proyecto de restauración que permitió renovar muchas de las habitaciones. Otras se dejaron vacías para dejar que los visitantes se imaginasen el aspecto del castillo antes de su recuperación.
Las plantas nucleares no suelen ser edificios que se queden abandonados, pero esto fue precisamente lo que le ocurrió a la de Marble Hill en 1984. Ya se habían invertido cerca de 3000 millones de dólares cuando se tomó la decisión de cerrar la planta tras el accidente nuclear de Three Mile Island, el cual tuvo lugar en 1979 en Pensilvania. A día de hoy, el edificio está en proceso de demolición.
Diseñada para competir con la Torre Eiffel de París, la Torre Watkin era un entramado de hierro sin acabar que finalmente fue demolido en 1907 después de que los gastos de construcción se disparasen.
La imponente basílica de Bolonia es conocida por su peculiar fachada, la cual está sin acabar. El arquitecto Giacomo Ranuzzi empezó las obras en 1538, pero luego las abandonó por razones que aún no están del todo claras.
La Escuela Nacional de Arte de La Habana fue un proyecto concebido y fundado por Fidel Castro y Che Guevara en 1961. En un principio se iban a construir cinco edificios, pero solo dos llegaron a completarse. Los tres restantes quedaron a abandonados y en ruinas durante años, pero acabaron por ser restaurados. Hoy en día, todo el complejo forma parte de la lista World Monuments Watch.
La crisis financiera asiática de 1997 marcó el final de la Sathorn Unique Tower, aunque por aquel entonces ya estaba completa al 80%. Hoy en día es uno de los edificios en ruinas más famosos de Bangkok.
Al contrario que la Gran Pirámide de Guiza, la de Neferefra nunca llegó a completarse. La construcción comenzó en el siglo XXV a.C. por orden del faraón Neferefra, pero se abandonó tras su muerte repentina. El templo mortuorio adyacente sí llegó a acabarse, pero solo muchos años después de su fallecimiento.
Esta famosa abadía italiana cuenta con una "nueva" iglesia del siglo XI que nunca llegó a completarse. El monasterio en sí mismo aún se conserva, pero hoy solo la usa la Orden Trinitaria, una orden religiosa católica fundada en el siglo XII.
La Torre Yeda, también conocida como "Kingdom Tower", comenzó a construirse en 2013 y a día de hoy sigue incompleta. Las obras llevan 10 años en un limbo del que todavía no han salido. En un principio iba a ser la torre más alta del mundo, de nada más y nada menos que 1 km de altura.
Lo único que se ha construido de la esperadísima Chicago Spire es la base. Desde 2008, las obras han estado paradas. Si hubiesen avanzado, el rascacielos se alzaría a 610 m de altura sobre la ciudad, convirtiéndose en el edificio más alto del hemisferio occidental.
El ambicioso Palacio Legislativo Federal de la Ciudad de México tendría que tener este aspecto, pero por desgracia, solo los cimientos y la estructura de hierro se completaron (para luego acabar siendo demolidos). De sus cenizas, sin embargo, se erigió el Monumento a la Revolución, coronado con una impresionante cúpula.
La Torre Hasán es el minarete de una mezquita incompleta ubicada en Rabat (Marruecos). Abu Yúsuf Yaacub al-Mansur, el tercer califa almohade, fue quien encargó su construcción. Sin embargo, las obras se abandonaron tras su muerte en 1199. Solo la torre sirve de testimonio de lo que podría haber sido.
Aunque fue consagrada en 1911, la catedral de san Juan el Divino de la Gran Manzana no está completa. Los conflictos laborales, los cimientos irregulares y los cambios de estilo contribuyeron a la falta de financiación y al retraso de las obras.
Visto desde el aire, el castillo de Beaumaris, ubicado en la isla galesa de Anglesey, se asemeja a cualquier otra ruina del siglo XIV. Sin embargo, su aspecto no se debe al paso del tiempo, sino a que nunca llegó a completarse. La invasión de Eduardo I de Inglaterra hizo que el dinero destinado a la construcción se desviase para otros propósitos.
Fuentes: (CNN) (UNESCO) (HeritageDaily) (World Monuments Fund)
Ver también: La cautivadora historia del castillo que inspiró a Walt Disney
Los misterios de los edificios históricos inacabados: Descubre sus secretos
Por una razón u otra, estas construcciones se quedaron a la mitad
ESTILO DE VIDA Arquitectura
Ningún proyecto está exento de fallos y lo mismo ocurre con la arquitectura. Muchos edificios se proyectaron para que fuesen auténticas obras maestras y, sin embargo, quedaron incompletos. Palacios, catedrales, rascacielos e incluso una planta nuclear fueron víctimas del abandono de quienes estaban destinados a construirlos, bien por falta de dinero, bien por enfrentamientos políticos. Si quieres saber cuáles son estas famosas construcciones, ¡sigue leyendo!