Los taquillazos hollywoodienses rara vez se ciñen a los hechos
El queerbaiting es una técnica de marketing que consiste en dar a entender que hay una cierta representación LGTBIQ+ cuando en realidad no es así. Es una forma de atraer a las personas queer o a los aliados del colectivo sin espantar a otros tipos de público.
La clave del queerbaiting es que alguien se beneficia de crear esa apariencia (ya sea ganando más dinero, vendiendo más discos, etc.) sin representar a la comunidad queer de forma explícita.
Parecer o fingir ser queer sin confirmarlo es una forma de llamar la atención sin tener que hacer frente a la discriminación o marginalización que las personas del colectivo sufren de verdad y que ha obligado a muchas a ocultar su identidad u orientación sexual en un momento u otro de su vida.
Los famosos que forman parte de la comunidad LGTBIQ+ se arriesgan a perder dinero y oportunidades cuando otras celebridades que parecen ser queer pero actúan de forma cisheterosexual en público se convierten en la opción más atractiva para las marcas y grandes producciones que pueden publicitarse como aliadas del colectivo sin ayudar realmente a quienes forman parte de él.
A muchos no les ha sentado bien que Harry Styles (un hombre blanco cisgénero al que solo se le conocen novias) esté recibiendo halagos por su estilo gender-fluid cuando los auténticos pioneros queer no reciben la misma atención. También hay quienes creen que lo hace a propósito para ganar más dinero.
El problema alcanzó una nueva dimensión cuando Styles protagonizó My Policeman, una película en la que interpreta a un policía gay. Muchos creyeron que su vaga identidad sexual le había ayudado a conseguir el papel. Ante la avalancha de críticas, Styles dijo lo siguiente en una entrevista para la Rolling Stone: "A veces la gente dice que solo he salido públicamente con mujeres, pero en realidad no creo que haya salido públicamente con nadie. Si alguien te saca una foto con otra persona, no significa que estés queriendo hacer pública tu relación ni nada por el estilo".
La opinión pública parece estar dividida entre quienes creen que obligar a alguien a salir del armario es malo para la comunidad LGTBIQ+ y quienes consideran que la vaguedad de Styles hace más mal que bien al colectivo. "Creo que todo el mundo, yo incluido, pasa por un proceso particular a la hora de entender su sexualidad y sentirse cómodo con ella", dijo en la entrevista.
Los seguidores de Ariana Grande la criticaron por hacer queerbaiting en 2019, año en el que sacó su canción "break up with your girlfriend, i'm bored". El tema incluye referencias a la bisexualidad tanto en la letra como en el videoclip, donde la cantante casi llega a besar a otra mujer.
En su canción conjunta "Monopoly", Grande y Monét cantan la frase "I like women and men". La cantante tuiteó que no siente la necesidad de "etiquetarse", mientras que Monét dijo claramente que siente atracción por las mujeres. Esto hizo que muchos acusasen a Grande de recurrir a la excusa de la etiqueta para esquivar las acusaciones de queerbaiting.
A mediados de la década de 2010, Nick Jonas supo jugar muy bien la carta del queerbaiting, subiéndose la camiseta en clubs para gente gay y rehuyendo las preguntas sobre si había tenido experiencias con hombres. En una entrevista de 2014 para Pride Source habló sobre su estrategia de marketing deliberada para llegar al público queer antes del lanzamiento de su álbum homónimo.
En la entrevista dijo que era hetero pero que apoyaba totalmente al colectivo. Cuando le preguntaron qué opinaba sobre quienes creían que estaba usando su cuerpo como cebo para atraer a la comunidad gay, dijo que le parecía "una pena" que la gente le buscase pegas a sus buenas intenciones y llegó a tildar a sus acusadores de ser "un poco ignorantes".
Sin embargo, la opinión pública se volvió en su contra cuando en junio de 2016 dio un discurso en honor a las víctimas del tiroteo de la discoteca Pulse de Orlando. Según Daily Beast, su discurso se consideró "corto de miras" y lleno de frases cliché como "el amor es el amor" y "todos somos iguales". Desde entonces, su estrategia de marketing ya no está tan orientada a la comunidad gay.
En 2019, Calvin Klein sacó un vídeo de la modelo Bella Hadid (quien se identifica como heterosexual) besando a la influencer Lil Miquela para la campaña #MYCALVINS. Esto no solo hizo que los seguidores de la marca la acusasen de hacer queerbaiting, sino también de no haber contratado a modelos verdaderamente queer para el anuncio.
Calvin Klein acabó publicando una disculpa en la que decía que "no era su intención distorsionar la imagen del colectivo" y que "lamentaba la ofensa".
Muchos vieron en la canción "I Kissed a Girl" de Katy Perry como una forma de llamar la atención a costa del colectivo, por lo hablar de que "Ur So Gay" anima a un hombre metrosexual "muy gay" al que "ni siquiera le gustan los hombres" a ahorcarse "con su bufanda de H&M".
Diez años después de "I Kissed a Girl", Perry le dijo a Glamour que "probablemente haría cambios" en la canción si se volviese a publicar para cambiar "un par de estereotipos". Cuando la cantante recibió el National Equality Award en 2017, confesó que había hecho más que "besar a una chica", pero que creció en un entorno extremadamente religioso que aprobaba los campamentos de conversión.
Según Jezebel, antes de que empezasen a salir a la luz acusaciones de mala conducta contra varias mujeres, James Franco se hizo eco de su supuesta identidad queer en medios tanto heterosexuales como homosexuales. Desde posar en drag para la portada de Candy Magazine en 2010 hasta la publicación en 2016 de su libro Straight James/Gay James, estaba claro que el actor tenía una estrategia de marketing muy definida.
Y se benefició de ella, ya que produjo y protagonizó una película titulada King Cobra sobre un asesino y actor porno gay y escribió Mother, May I Sleep With Danger, una película lésbica sobre adolescentes vampiras. También publicó un vídeo muy sonado en el que su personalidad hetero entrevistaba a la gay, llegando a acuñar la famosa frase "gay en el arte y hetero en la vida".
Cuando le preguntaron acerca de su sexualidad directamente, Franco respondió que "dependía de lo que la gente definiese como gay". "Si tiene que ver con quién te acuestas, entonces supongo que soy hetero", dijo. Para resumir su actitud interesada, Billy Eichner publicó un tuit en 2016 en el que decía que "James Franco es la Rachel Dolezal de la gente gay".
Los fans de Rita Ora se le echaron encima en 2018 cuando publicó su canción "Girls" con Bebe Rexha, Cardi B y Charli XCX. En ella, la artista hace claras referencias a la bisexualidad y canta sobre beber vino tinto y querer besar a chicas después.
Muchas personas dijeron que la letra trivializaba la bisexualidad y perpetuaba estereotipos negativos. Las cantantes abiertamente queer Hayley Kiyoko y Kehlani estuvieron entre las que criticaron la canción en Twitter.
En respuesta, la cantante británica se disculpó y acabó saliendo públicamente del armario. "La escribí para representar mi verdad y reflejar una experiencia muy real y honesta que tuve en mi vida", dijo. Y añadió: "He tenido relaciones románticas con mujeres y hombres a lo largo de mi vida. Lo siento si mi forma de expresarlo ha molestado a alguien".
Madonna es una figura interesante, ya que muchos la consideran un "icono gay" y siempre se ha involucrado en la defensa de la comunidad LGTBIQ+. Incluso llegó a admitir que no habría tenido la trayectoria que tuvo de no ser por el colectivo. Sin embargo, el problema vino cuando decidió compararse con Lil Nas X.
El cantante ha sido acusado de hacer queerbaiting principalmente por sus bromas en redes sociales, como utilizar el filtro "top-or-bottom" de TikTok y fingir no saber que se diseñó específicamente para la comunidad queer.
Hay quienes dicen que Puth parece estar siguiendo los pasos de Nick Jonas con sus fotos cada vez más explícitas y su uso de la jerga queer justo cuando se acercaba la fecha de publicación de dos de sus singles en 2022.
Billie Eilish también estuvo en el centro de la polémica tras publicar el sugerente videoclip de "Lost Cause", donde comparte varios momentos sensuales con otras mujeres. La cantante también publicó imágenes del rodaje con la frase "I love girls". Cuando le preguntaron sobre el tema en una entrevista para Elle, se limitó a decir que es imposible tener esa energía con los hombres.
El principal problema parece ser el conflicto entre el hecho de que nadie le debe explicaciones a nadie sobre su vida privada y que algunas grandes personalidades del mundo de la farándula parecen estar aprovechándose del colectivo LGTBIQ+ para ganar más dinero sin llegar a formar parte explícita de él detrás de las cámaras.
Fuentes: (Rolling Stone) (Out) (Pride Source) (Billboard) (TheThings) (The Daily Beast) (Jezebel)
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Cuando Lil Nas X besó a uno de sus bailarines en el escenario de los BET Awards de 2021, Madonna publicó la foto de su beso con Britney Spears y Christina Aguilera en los MTV Video Music Awards de 2003. En lugar de celebrar que un hombre queer negro estuviese viviendo sus verdad públicamente, decidió darse una palmadita en la espalda a sí misma con el hashtag "#diditfirst".
Miles de fans empezaron a criticarla y no tardaron en recordarle que que una mujer blanca bese a otra para satisfacer las fantasías de los hombres heterosexuales no es lo mismo que que un artista negro y queer exprese abiertamente quién es. "La gente blanca y cisheterosexual siempre ha tenido espacio para hacer lo que quisiese y eso incluye el queerbaiting", escribió la famosa cuenta de Instagram Diet Prada.
La acusaron de lucrarse a costa del colectivo y de participar en la hipersexualización de las mujeres queer, así como de perpetuar el estereotipo de que las personas bisexuales son más propensas a ser infieles en las relaciones.
¿Qué es el "queerbaiting" y qué celebridades han sido acusadas de hacerlo?
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FAMA Lgbtq+
El término queerbaiting, que en español vendría significando algo como cebo queer o reclamo LGTBIQ+, hace referencia a una estrategia de marketing que consiste en crear una ambigüedad sexual que atraiga a las personas que forman parte del colectivo sin participar realmente en su representación para tener más seguidores o una mayor audiencia. Es algo que puede darse en películas, novelas, series de televisión e incluso celebridades como tal. Si quieres saber qué famosos han sido acusados de representar negativamente al colectivo o de jugar con sus ilusiones, ¡sigue leyendo!