Así afecta la presa de las Tres Gargantas a la Tierra
Si no limpias el polvo ni pasas la aspiradora, tu casa se convertirá en un paraíso para los alérgenos, especialmente los ácaros del polvo. Estas criaturas microscópicas se alimentan de las células muertas de la piel que la gente desprende a lo largo del día.
Los ácaros del polvo viven en muebles, alfombras, ropa de cama y animales de peluche. Pueden convertirse en un verdadero problema para las personas alérgicas o asmáticas.
Los ácaros del polvo son una causa frecuente de alergias y síntomas de asma durante todo el año. Básicamente, puedes reducir estos síntomas de alergia manteniendo tu casa limpia.
El moho es un hongo que se reproduce a través de esporas ligeras que viajan por el aire. Las zonas más propensas a atraer moho son los lugares húmedos, como los cuartos de baño, la zona de lavandería y los alféizares de las ventanas sin sellar.
Para deshacerte del moho, friega la zona afectada con un limpiador de moho, como lejía, bórax o vinagre. Utiliza un cepillo suave y limpio hasta que desaparezca.
Una casa desordenada aumenta las posibilidades de tropezar y caerse. Esto puede provocar lesiones graves, sobre todo si te caes por las escaleras o pisas un cristal.
La basura podrida atrae a moscas y otros bichos que quieren alimentarse de los restos de comida. No dejes de sacar la basura, porque de lo contrario estarás invitando a los bichos a entrar.
Asegúrate de vaciar e higienizar los cubos con regularidad. Ten un sistema de gestión de residuos adecuado y no te olvides de sacar la basura.
Las sábanas deben lavarse una vez a la semana o cada dos semanas como máximo. De lo contrario, estarás durmiendo con ácaros del polvo, suciedad, pelos, aceites de tu cuerpo, etc.
Lava la ropa de cama y las sábanas con agua y jabón a una temperatura de 60 °C o superior para eliminar cualquier resto de suciedad. Aunque pueda parecer un engorro, te encantará dormir en una cama limpia.
Cuanto más esperes para limpiar, más difícil te resultará cuando llegue el momento. Para evitarlo, intenta mantener un horario de limpieza en el que dediques entre 15 y 20 minutos a ordenar cada día.
Adopta el hábito de limpiar a menudo, ya que así las tareas de limpieza te resultarán menos pesadas y más ligeras. Con menos suciedad que fregar, más rápido será limpiarla.
Si tienes una mascota, la situación puede empeorar. Hay que tener en cuenta que la caspa de las mascotas y los accidentes deben solucionarse de inmediato. Si no lo haces, destrozarás tu hogar.
Una casa sin limpiar te estresará. Imagina llegar a casa con la cama bien hecha y los platos lavados, en vez de con el sofá lleno de ropa sucia.
Las sobras olvidadas pueden provocar la aparición de moho en tu frigorífico o despensa. Otros factores pueden ser la temperatura de almacenamiento, la humedad, el oxígeno, el contenido de agua y la acidez.
Así que cuando dejas de limpiar tu casa, estás dando la bienvenida a la comida podrida para que se apodere de ella. Y eso no solo es asqueroso, sino también un desperdicio de dinero.
Los estudios han descubierto que el desorden puede dificultar la concentración en una tarea y disminuye la productividad. Por eso, limpiar tu espacio con regularidad puede ayudarte a pensar con más claridad.
Cuando descuidas la limpieza de tu frigorífico, el moho y las bacterias pueden empezar a crecer debido a los vertidos y a las sobras olvidadas. ¡No querrás eso donde guardas tu comida!
Asegúrate de limpiar a fondo el frigorífico para eliminar las bacterias acumuladas que no son visibles. Además, no olvides retirar los objetos malolientes, ya que así reducirás los olores desagradables.
El desorden no solo es desagradable, sino que es el mejor lugar para vivir para pequeños animales y bichos. Esto se debe a que les proporciona refugio e incluso comida.
Por supuesto, no tienes por qué vivir en un ambiente estéril. Pero si vas a recibir visitas, lo más educado es pasar la aspiradora y limpiar la encimera.
Además de las alergias, vivir en una casa desordenada y sucia puede hacerte enfermar gravemente. Por ejemplo, el moho puede hacer que la gente te sientas mal, y los bichos llevan gérmenes y muchas enfermedades a tu casa.
Cuando no limpiamos, los conductos de aire y los sistemas de ventilación pueden obstruirse con polvo y residuos. El polvo acumulado puede circular por el aire y provocar alergias y otros problemas respiratorios.
Puedes mejorar la calidad del aire controlando tu exposición a los contaminantes, ventilando tu casa con aire fresco y utilizando purificadores.
Un hogar desordenado puede provocar muchas emociones negativas, como ansiedad e incluso depresión. Puede ser difícil determinar el motivo real de estos sentimientos, pero mantener un hogar ordenado puede ayudar a aliviarlos.
Los cuartos de baño pueden parecer autolimpiables, pero lamentablemente no lo son. Los azulejos y las juntas de los baños son algunas de las zonas más propicias para la aparición de moho, así que límpialos semanalmente.
Es posible que no notes los olores propios de tu hogar, sobre todo cuando estás expuesto a ellos durante mucho tiempo. Pero lo cierto es que, cuando dejas de limpiar, tu casa empieza a oler fatal.
Los olores desagradables de tu casa pueden proceder de restos de comida, cubos de basura, ropa mojada, humedad no deseada, desagües de duchas e incluso animales domésticos.
Fuentes: (Bustle) (Showbiz Cheat Sheet)
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ESTILO DE VIDA Higiene
A menos que seas un maniático del orden, es posible que alguna vez hayas pospuesto la limpieza. Sin embargo, cuando la pereza ataca, también lo hace el polvo y en poco tiempo estás viviendo en la mugre. En ese momento, quizá te pares a pensar qué pasaría si no limpiaras nunca más. Y aunque es tentador imaginar una vida sin pasar la aspiradora ni limpiar encimeras, probablemente querrías considerar todas las cosas negativas que podrían ocurrir si dejaras de hacer las tareas domésticas y no contrataras a alguien para que las hiciera.
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