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Equipaje -

Es mucho más fácil meter en el coche equipaje blando, como bolsas de deporte o bolsas de lona, que maletas grandes.

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Equipaje -

Si en tu hogar reina la practicidad, las bolsas de basura son realmente la mejor solución.

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Dedos pegajosos -

Las toallitas húmedas son imprescindibles en cualquier viaje con niños, pero ahora más que nunca. Siempre es buena idea llevar desinfectantes e incluso botecitos de jabón de manos, por si acaso en las paradas de servicio no hay.

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Aperitivos - Los tentempiés son esenciales en cualquier viaje por carretera. Sin embargo, debemos evitar alimentos que ensucien mucho o sean muy pegajosos. Mete unas galletas saladas o uvas dentro de unas bolsas de congelar con cierre. Son tentempiés sencillos y estupendos.

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Aperitivos -

Una forma creativa de mantenerlos saciados y entretenidos es llenar un tarro de mermelada con tentempiés saludables, como frutos secos, pero con algunas golosinas, como monedas de chocolate o caramelos, escondidas en su interior.

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Entretenimiento -

Una de las mayores preocupaciones en los viajes largos en coche es mantener a todo el mundo entretenido. Nadie quiere viajar con un coro de "¿cuánto falta?".

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Entretenimiento -

Siempre es buena idea que cada niño lleve una mochila con los libros o juguetes que quiera usar durante el viaje.

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Libros -

Si a tus hijos les gusta leer en el coche, puedes llevarles a la biblioteca antes de las vacaciones para que escojan unos cuantos libros nuevos. Guárdalos hasta que empiece el viaje para aumentar la emoción.

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Libros - La visita a la biblioteca también puede convertirse en un ritual anual previo a las vacaciones que les entusiasme y fomente su interés por la lectura.

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Sorpresas -

La novedad de estar en el coche se pasa muy rápido, así que es bueno tener algunos juguetes sorpresa para sacar cuando los pequeños empiecen a inquietarse.

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Sorpresas -

Los libros de actividades con pegatinas o los libros de "elige tu propia aventura" son fantásticos para mantener ocupados a los niños.

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Sorpresas -

Incluso puedes envolver un pequeño juguete o libro nuevo y esconderlo debajo de sus asientos para que lo descubran más tarde.

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Cantar juntos -

Una canción es una forma divertida de entretener a todo el mundo. Pueden ser canciones que estén aprendiendo en el colegio o éxitos de la radio.

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Audiolibros -

Los audiolibros son ideales para los viajes por carretera, sobre todo para los que no les gusta leer en el coche o se marean. Además, toda la familia puede escucharlos.

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Audiolibros -

La serie "Harry Potter", narrada por el incomparable Stephen Fry, es una gran elección.

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Spotify - La sección infantil de Spotify también tiene una gran variedad de canciones y cuentos que pueden escuchar en el coche.

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Tecnología -

Que no te preocupe apoyarte en la tecnología para sobrellevar el viaje. Un poco más de tiempo frente a la pantalla puede merecer la pena.

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Tecnología -

Puedes elegir de antemano algunas de sus películas favoritas o buscar nuevas aplicaciones infantiles para que jueguen.

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Paradas divertidas -

Las paradas frecuentes y las oportunidades para estirar las piernas son importantes, ¡pero puedes optar por algo mejor que una gasolinera! Intenta encontrar zonas de recreo o parques en tu ruta donde puedas tomarte un descanso de 30 minutos.

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Paradas divertidas -

Durante alguna de estas paradas, puedes hacer un pícnic.

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Paradas divertidas -

Si es posible, planifica tu ruta en torno a puntos de interés o incluso divide el viaje en varias partes y pasa la noche en algún lugar nuevo antes de llegar al destino final.

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Juegos típicos de viajes en coche -

El juego de 20 preguntas es un clásico para jugar con los niños. Piensa algunas ideas divertidas antes del viaje.

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Juegos típicos de viajes en coche -

Organiza un juego continuo de "cuántos/as _______ ves" al que los niños puedan jugar durante el viaje. Pueden ser coches rojos, puentes o vacas. Deben estar atentos e intentar ser los primeros en descubrir el objeto elegido.

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Juegos típicos de viajes en coche -

Los niños más mayores no caerán en esta trampa, pero "el juego del silencio" consiste en ver quién aguanta más tiempo callado.

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Discusiones y rabietas -

Es normal que los niños se pongan de mal humor en un viaje largo y que se pongan a discutir. Lo mismo ocurre con las rabietas de los más pequeños.

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Rabietas -

Si hay dos padres en el coche, lo ideal es que uno pueda ocuparse del drama del asiento de atrás, mientras el otro se concentra plenamente en la conducción. Si no, lo mejor es aparcar e intentar calmar los ánimos de forma segura.

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Sobornos -

Si todo lo demás falla, el soborno puede ser la solución. La promesa de un pequeño capricho al final del viaje como recompensa por portarse bien puede ser la motivación adecuada.

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