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¿Estás harto? -

Tras años de monotonía, cada vez hay más personas que se sienten quemadas y agotadas.

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¿Estás harto? -

Aunque hagas deporte, comas bien y duermas lo suficiente, siempre estás cansado. Este agotamiento te sigue a donde quiera que vayas como una nube negra.

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Siete tipos de descanso -

Si lo estás haciendo todo bien y aun así te sientes agotado, es posible que se deba a que necesitas otro tipo de descanso.

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Siete tipos de descanso -

Los siete tipos de descanso son el físico, el emocional, el espiritual, el mental, el creativo, el social y el sensorial. Si uno de ellos cojea, los demás no tardan en desequilibrarse.

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Descanso emocional -

Cuando alguien carga con más peso emocional de la cuenta, empieza a sentir cómo este le asfixia y le impide expresar sus propias necesidades.

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Descanso emocional -

Las personas que necesitan descanso emocional suelen ser cuidadores y gente a la que le cuesta decir que no. Siempre están ahí por y para los demás a costa de su propio bienestar.

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Prioridades -

El descanso emocional ocurre cuando dejamos de preocuparnos por el qué dirán y empezamos a anteponer nuestras emociones a las de los demás. De esa manera tenemos tiempo y espacio para disfrutar de la autenticidad de nuestros sentimientos.

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Al límite -

Si siempre tienes que hacer un esfuerzo por mantener tus sentimientos en regla, puede que necesites un descanso emocional.

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Al límite -

Si te sientes malhumorado y como si todo el mundo estuviese en tu contra, es momento de que te tomes un respiro de lo que te está generando estrés.

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Estrés acumulado -

Si sigues estirando el chicle aunque ya no te quede energía, empezarás a acumular estrés en varios aspectos de tu vida que no podrás procesar.

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Estrés acumulado -

Por lo tanto, sentirse emocionalmente agotado es algo normal. Si te sirve de consuelo, no estás solo: según un estudio realizado por la American Psychological Association en 2021, el 32% de los participantes dijo sentirse así.

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Brecha generacional -

Según un estudio de Indeed, los milenials y la generación Z tienen más papeletas para desarrollar estrés que los boomers. ¿Pero será porque estos últimos se estresan menos o porque simplemente no son conscientes o no hablan de ello? No hay forma de saberlo.

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Causas del agotamiento emocional -

Existen varias causas comunes del agotamiento emocional, entre las que se incluyen el estrés financiero, los trabajos insatisfactorios, la crianza o el cuidado familiar y la escolarización intensa.

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Señales de que necesitas un descanso emocional -

Si notas que todo te molesta, que nada te motiva, que el miedo te frena o que tienes la mente en otro lugar, es probable que necesites un descanso emocional.

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Recargar pilas -

Al limitar los factores estresantes, te das la oportunidad a ti mismo de recargar pilas. Sin embargo, esto es prácticamente imposible si siempre estás ocupado.

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Recargar pilas -

Si por mucho que duermas aún te sientes cansado, es de vital importancia que saques tiempo y espacio para tu bienestar. Relajarte y rejuvenecer tus emociones tiene que convertirse en una prioridad para ti.

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Por dónde empezar -

Uno de los primeros pasos que debes dar es pensar en actividades que te den energía y que no te la quiten. Si no se te ocurre nada, es momento de dar rienda suelta a tu creatividad y de explorar las cosas que te hagan recuperar la vitalidad.

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Por dónde empezar -

Escribir, pasar tiempo en el campo, hacer cosas que te hagan feliz o apoyarte en tus seres queridos son buenos puntos de partida.

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Ejercicio -

Sacar tiempo para hacer deporte es una de las mejores maneras de recibir un chute de hormonas de la felicidad. Aunque te sientas cansado y no te apetezca, hacer ejercicio es un forma estupenda de recuperar energía.

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Ejercicio -

Ten en cuenta que no necesitas apuntarte a un gimnasio. Pasear por la naturaleza, estirar o participar en una clase que te guste te ayudará a centrarte en el presente y a dejar a un lado las preocupaciones, ayudándote a cuidar de ti y tus emociones.

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Conciencia plena -

Saca tiempo en tu día a día para practicar la conciencia plena. La meditación puede ayudarte a reconectar con tu cuerpo y tus emociones, sobre todo si has estado muy pendiente de las de los demás.

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Conciencia plena -

Haz una pausa de 15 minutos para realizar una meditación guiada o para estar en silencio y sintonizar con tu cuerpo. Escribe sobre tus emociones a medida que vayan fluyendo.

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Mascotas -

El amor incondicional de una mascota puede ayudarte a reponer energía. Si has estado al límite últimamente, saca tiempo para estar con tu amigo peludo.

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Mascotas -

Es más, las mascotas pueden ayudarte a reconectar con tu lado más infantil y juguetón. También reducen el estrés y la soledad e incluso ayudan mejorar la salud cardiovascular.

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En contacto con la naturaleza -

Estar en contacto con la naturaleza puede ayudarte a conectar con el presente. Si vives en una ciudad, está demostrado que tener plantas en casa ayuda a reducir el estrés y la tensión arterial.

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En contacto con la naturaleza -

Pero si puedes, sal de casa, respira hondo y observa tu entorno. Esto te ayudará a regular el sistema nervioso y a calmar el ruido mental.

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Existe -

Disfruta de no hacer nada. No todos los momentos tienen que ser productivos ni tienes que estar disponible las 24 horas del día. Deshabilita las notificaciones y ve a algún sitio relajante.

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Pasa tiempo con quienes se preocupan por ti -

Conectar con gente de confianza que te quiera y se preocupe por ti es una forma estupenda de combatir el agotamiento emocional, ya que te sentirás más acompañado.

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Pasa tiempo con quienes se preocupan por ti -

Habla con personas que te entiendan, no para que ellas te solucionen el problema, sino simplemente porque necesitas que te escuchen. Apóyate en tus amigos y familiares: ¡no tienes por qué pasar por ello solo!

Fuentes: (Stylist) (Mind Help) (INTEGRIS Health) 

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