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Tamara Samsonova -

A esta mujer rusa la apodaron "Abuela Destripadora" y "Baba Yaga". La atraparon en 2015, después de que una cámara la grabara transportando partes del cuerpo de su víctima en bolsas de plástico. Samsonova cuidaba de Valentina Ulanova pero, tras una discusión por unos platos sucios, le dio somníferos y la desmembró con una sierra mientras aún estaba viva.

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Tamara Samsonova -

Samsonova podría haber matado a otras personas, ya que detalló en su diario el asesinato de un marido y de anteriores inquilinos. En 2017, la declararon culpable únicamente del asesinato de Ulanova y la enviaron a una institución mental tras diagnosticarle esquizofrenia paranoide.

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Helen Golay y Olga Rutterschmidt -

Estas dos mujeres, también conocidas como "las abuelas asesinas de Santa Mónica", supuestamente diseñaron un plan para atraer a hombres sintecho a su casa y luego hacerles contratar un seguro de vida. Luego los atropellaban simulando accidentes y se daban a la fuga.

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Helen Golay y Olga Rutterschmidt -

Más tarde, cobraron 2,8 millones de dólares tras matar a dos hombres. Al final, sin embargo, una de las compañías de seguros sospechó y, junto con la policía, resolvió el caso. En 2008 fueron acusadas y condenadas a cadena perpetua.

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Nancy Crampton-Brophy -

A la autora autopublicada la acusaron de disparar a su marido el 2 de junio de 2018 en su lugar de trabajo, en el Instituto Culinario de Oregón.

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Nancy Crampton-Brophy -

Como curiosidad, había escrito un ensayo en 2011 titulado "Cómo asesinar a tu marido". El 25 de mayo de 2022, a Crampton-Brophy la declararon culpable de asesinato en segundo grado y la condenaron a cadena perpetua.

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Faye Copeland -

Faye Copeland y su marido, Ray, supuestamente atrajeron a vagabundos a su granja de Missouri para cometer fraude con el ganado. La pareja supuestamente asesinó a los vagabundos y enterró sus cuerpos en un campo de la propiedad.

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Faye Copeland -

Finalmente, las capturaron y las condenaron a muerte, lo que convirtió a Faye Copeland en la mujer de más edad en el corredor de la muerte, con 69 años. En 1999, su condena fue conmutada por cadena perpetua. Murió en prisión en 2004.

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Leonarda Cianciulli -

Fue la profecía de una adivina lo que desencadenó la matanza de esta mujer italiana. A Cianciulli le habían dicho que todos sus hijos estaban destinados a morir jóvenes y la tragedia se cebó con su familia. Estuvo embarazada 17 veces, perdió a 13 hijos, de los cuales tres murieron antes de nacer. Al parecer, Cianciulli llegó a creer que necesitaba proteger la vida de los hijos que habían sobrevivido mediante la magia negra.

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Leonarda Cianciulli -

Entre 1939 y 1940, Cianciulli mató a tres mujeres. Luego convirtió sus cuerpos en jabón y pastas, que ofrecía a sus amigos. Cianciulli fue capturada y confesó los asesinatos. La apodaron "la jabonera de Correggio" y la condenaron a 30 años de prisión y tres de internamiento en un manicomio, donde murió en 1970.

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Gloria Marie Tensley -

En 2016, cuando un hombre de Arkansas se mudó con su nueva compañera de piso, Gloria Marie Tensley, de 65 años, descubrió un esqueleto humano en su armario.

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Gloria Marie Tensley -

Tras entregarla, se descubrió que Tensley había estado cobrando los cheques de la seguridad social del hombre fallecido encontrado en su armario. Las autoridades la acusaron de abuso de un cuerpo y fraude.

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Nilda Sheffield -

En 2015, Nilda Sheffield escribió en su diario que quería matar a su hija y a sus nietos para liberarlos del infierno. Se comparó con Abraham, una figura bíblica a la que Dios pidió que sacrificara a su propio hijo.

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Nilda Sheffield -

La abuela de Florida disparó entonces a Elizabeth Flores, de 31 años, y a sus hijos, de siete y dos años, antes de apuntarse a sí misma. Al parecer, Sheffield creía que la familia se reencarnaría y volvería a encontrarse en sus próximas vidas.

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Amelia Dyer -

Se dice que Amelia Dyer mató a lo largo de 20 años a más de 400 bebés mientras trabajaba como "granjera de bebés", es decir, alguien que adopta niños por dinero.

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Amelia Dyer -

Dyer, que vivía en Inglaterra en la época victoriana, asesinaba a los niños o los dejaba morir por negligencia. Las autoridades la condenaron a morir en la horca y la ejecutaron en el verano de 1896.

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Angela Bingham -

En 2016, Angela Bingham mató a su nieto de tres años asfixiándolo con una toalla, alegando que no podía permitirse criarlo.

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Angela Bingham -

Tras entregarse a la policía, los investigadores la encontraron quemando incienso para enmascarar el olor del cuerpo en descomposición. Las autoridades de Delaware la condenaron a 22 años de prisión.

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Nannie Doss -

La prensa apodaba a Nannie Doss, nacida en 1905, la "Abuelita Risueña" por lo alegre que era. Sin embargo, sus crímenes eran de todo menos dulces.

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Nannie Doss -

A lo largo de 30 años, la mujer de Oklahoma fue acusada de matar a cuatro maridos, sus dos hermanas, su madre, un nieto, una de sus suegras y un sobrino. Supuestamente, cometió los asesinatos por aburrimiento. A Doss la condenaron a cadena perpetua en 1955, y murió encarcelada 10 años después.

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Mangal Bharat Thorat -

En noviembre de 2005, tras una discusión sobre una dote, Mangal Bharat Thorat, de 62 años, golpeó a su nuera, Neelam Thorat, la empapó en queroseno y le prendió fuego. El Tribunal Superior de Bombay condenó a Thorat a cadena perpetua.

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Mangal Bharat Thorat -

Neelam sufrió quemaduras en el 85% del cuerpo y murió posteriormente en el hospital Bhatia. Al parecer, Thorat la había atormentado desde su boda a principios de marzo.

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Carolyn Hood -

En 2016, las fuerzas del orden de Montgomery detuvieron a Carolyn Hood, de 79 años, por presuntamente ayudar a su hijo a matar a su marido. Los restos del marido aparecieron enterrados en varios lugares.

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Carolyn Hood -

Ambos se enfrentaban inicialmente a cargos de asesinato capital. Sin embargo, en 2017, los tribunales de Alabama retiraron el caso contra Hood, que más tarde se trasladó a una residencia de ancianos. Su hijo se declaró culpable de homicidio involuntario y lo condenaron a cadena perpetua.

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Dorothea Puente -

En los años 80, Dorothea Puente dirigió una pensión en Sacramento, California, y mientras lo hacía asesinó a varios ancianos y discapacitados mentales, antes de cobrar sus cheques de la seguridad social.

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Dorothea Puente -

La condenaron por asesinar a nueve personas: las obligó a tomar sobredosis de pastillas y las enterró después bajo su casa. Puente fue capturada en 1988 y condenada en 1993. Murió en prisión en 2011 a los 82 años.

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Sandra Layne -

En 2012, las fuerzas del orden detuvieron a Sandra Layne, de 74 años, tras disparar varias veces a su nieto de 17 años. En el juicio, su abogado argumentó defensa propia, alegando que su nieto era drogadicto y que ella le tenía miedo.

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Sandra Layne -

Layne fue condenado a 22 años de prisión después de que el jurado concluyera que el asesinato había sido realmente premeditado.

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Melissa Ann Shepard -

La abuelita canadiense asesinó a dos de sus cinco maridos con tranquilizantes. Las pruebas también demostraron que, además, intentó sin éxito matar a otros dos hombres que también estuvieron casados con ella.

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Melissa Ann Shepard -

Cuando la detuvieron, la policía encontró un arsenal de medicamentos recetados por cinco médicos distintos.

Fuentes: (Ranker) (Oxygen True Crime)

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