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Deja espacio entre tu toalla y las de los demás -

Si algo nos ha enseñado la pandemia es que debemos respetar el espacio personal de los demás, ya no solo por seguridad, sino también por una cuestión de cortesía. La regla de oro es estar a una distancia que no te permita escuchar con claridad lo que lo otros están diciendo.

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No tapes las vistas -

Si llegas más tarde a la playa que los demás, no les pongas una sombrilla o unas sillas delante y les tapes la vista. ¡Ellos también tienen derecho a ver el mar! Y no solo eso, sino que puede que también necesiten estar pendientes de sus hijos.

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Busca un espacio libre en el que jugar -

Si te gusta jugar con amigos y familiares cuando vas a la playa, intenta escoger un lugar despejado para no correr el riesgo de molestar o hacer daño a alguien.

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No dejes basura -

¡Ni se te ocurra dejar basura en la playa! No solo es irrespetuoso y contaminante, sino también peligroso para los animales y para quienes van descalzos. ¡Buscar un contenedor no es tan difícil!

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No dejes basura -

Lo mejor que puedes hacer es llevar productos reutilizables (como servilletas de tela) y no generar residuos directamente. ¡El planeta te lo agradecerá!

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No alimentes a los pájaros -

Alimentar a las gaviotas es una idea terrible, ya que su alimentación ideal no es a base de carbohidratos para humanos. Y además de eso, ¡a nadie le gusta tener a un grupo de gaviotas peleándose por los restos de comida al lado!

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No pongas la música alta -

Aunque nos creamos los protagonistas de nuestra propia película, los demás no tienen por qué escuchar la música de otras personas (y mucho menos a todo volumen). ¡Hay quienes van a la playa buscando paz y tranquilidad!

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Si lo haces, cuidado con las canciones que eliges -

Si por algún motivo tienes que usar altavoces, intenta poner el volumen bajo. Y, a poder ser, escoge canciones aptas para todos los públicos (es decir, nada de heavy metal o de temas con letras obscenas).

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No pierdas de vista a tus hijos -

La playa es un espacio que compartimos con muchas otras personas, así que asegúrate de que tus hijos no tiren arena, salpiquen o miccionen (ya sea en la arena o en el agua) para no molestar a los demás.

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Si tu hijo tiene un berrinche, llévatelo a un lugar apartado -

Gritarles a los niños para que se calmen no sirve de nada. Lo mejor que puedes hacer es llevarte a tu hijo a un lugar alejado hasta que se calme.

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Cuidado con las cremas solar en espray -

Las cremas de sol en espray se han puesto de moda estos últimos años, pero hay que tener cuidado al utilizarlas para evitar que las partículas acaben los ojos, la nariz o la boca de la persona que tienes al lado.

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Tapa los agujeros -

Cavar agujeros en la playa es muy divertido, sobre todo cuando se tienen niños. No obstante, hay que acordarse siempre de taparlos para evitar que una persona distraída pueda tropezar con ellos y hacerse daño.

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No fumes ni dejes colillas en la arena -

Nada estropea más la experiencia de ir a la playa que tragarte el humo de otra persona o caminar pisando colillas. De hecho, fumar en la playa es algo desaconsejable e incluso ilegal en algunos lugares. Si fumas, intenta no molestar y lleva un recipiente en el que guardar las colillas para tirarlas más tarde.

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No presiones a tus amigos para que se bañen -

Hay personas que no se sienten como pez en el agua y no hay nada de malo en ello. Si a un amigo tuyo no le apetece bañarse, no lo presiones. ¡Más vale prevenir que lamentar!

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Ten cerca a tu mascota -

Las playas donde se admiten mascotas son un lugar estupendo para ir a pasear y jugar con tu perro. No obstante, es importante que no lo pierdas de vista para evitar que moleste a quienes están alrededor.

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Ayuda a tu mascota y al resto de personas -

Asimismo, estar en una playa no es excusa para no limpiar las heces de tu perro. Las algas pueden actuar como laxante, por lo que es importante que estés pendiente de él para que no se las coma. Y no te olvides de llevar agua fresca encima para limpiarlo, ya que el agua salada puede irritarles la piel.

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No te pases con las muestras de afecto -

Aunque estés enamorado y ligero de ropa, recuerda que la playa no es el lugar adecuado para dejarse llevar por las muestras de afecto.

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Cuidado con los abrigos solares -

Si vas a montar un abrigo solar, ponte hacia atrás o de lado para no taparle la vista a los demás.

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Coloca bien la sombrilla -

En la playa suele soplar el viento y lo último que quieres es que tu sombrilla salga volando y estrellándose contra alguien. Asegúrate de que esté bien fija y ciérrala cuando vayas a bañarte.

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Cuidado con el tono -

¿Te gustaría tener que pasarte la tarde en la playa escuchando conversaciones o discusiones ajenas al teléfono? Probablemente no, así que intenta no hacer lo mismo.

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No te quedes mirando -

En algunos países las mujeres hacen topless en la playa. Tanto si vienes de un lugar donde esto no es habitual como si no, no te quedes mirando. No solo es de mala educación, sino que harás que se sientan incómodas.

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No ocupes asientos -

Si no tienes pensado quedarte en la playa según llegues, no dejes tus pertenencias en las tumbonas para evitar que otros las ocupen, sobre todo si son de uso gratuito.

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Bebe con moderación -

Si estás en una playa donde es legal beber, ten cuidado y no te pases con el alcohol. ¡A nadie le apetece tener que andar aguantando a gente con varias copas de más encima!

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Lleva ropa adecuada -

Los bikinis que no aguantan ni la primera ola o los bañadores que revelan más de la cuenta al contacto con el agua no son la mejor opción cuando se va a la playa...

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Lleva las chanclas en la mano -

Aunque el suelo esté caliente, es arriesgado cruzar toda la playa en chanclas, sobre todo si te toca sortear toallas ajenas. ¡Más de uno acabará con arena en la cara!

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Saca fotos respetuosas -

Todo el mundo puede sacarse fotos en la playa, pero puede que las personas no quieran salir de fondo (y mucho menos si están ligeras de ropa).

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No ignores las señales -

Cuando llegues a la playa, dedícale un momento a leer las señales de advertencia. ¡Sé responsable y no hagas que los socorristas tengan que pitarte o incluso salvarte la vida!

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Ten cuidado con la comida que llevas -

Las ensaladas de huevo y los sándwiches de atún no son la mejor opción para ir a la playa, ya que con el calor empiezan a desprender olor.

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Y con la forma de sacudir la arena de la toalla -

Sacudir la toalla cuando sopla el viento es la mejor forma de lograr que las demás personas se enfaden contigo. Dóblala y sacúdela cuando estés en un lugar alejado donde no molestes a nadie.

Fuentes: (Martha Stewart) (Delaware Online) (Lohud) (Fork & Wander)

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