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¿Qué implica ser ambivertido? -

Una persona ambivertida es aquella a medio camino entre la introversión y la extroversión. Según varios estudios, los ambivertidos hablan y escuchan por igual, ya que tienen rasgos de ambas personalidades.

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Te lo pasas igual de bien solo que con gente -

Puedes pasarte horas a tu rollo y luego acabar el día cenando con amigos. Al ser un híbrido entre un introvertido y un extrovertido, ambas situaciones te hacen feliz.

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No siempre te apetece conocer gente -

Aunque te guste ampliar tu círculo social, no siempre tienes ganas. A veces no te apetece iniciar una conversación. ¡Todo depende de qué humor tengas!

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Eres reservado -

Eres una persona reservada. Esto quiere decir que ni te desgañitas en un concierto ni te pasas todo el espectáculo callado.

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No te importa tener conversaciones cortas -

Las conversaciones breves te parecen agradables. No necesitas pasarte horas y horas hablando con alguien.

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Se te da bien negociar -

Al ser bueno hablando y escuchando, se te da bien negociar. Las personas que te rodean se sienten escuchadas cuando están contigo.

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Eres observador -

Eres observador y no te cuesta dar un paso atrás y escuchar. No obstante, si tienes algo que decir, lo harás.

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Unos días te sientes más sociable que otros -

Algunos días te apetece mucho socializar y otros sientes que necesitas tu propio espacio. ¡A veces incluso cambias de una idea a otra en el mismo día!

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Se te da bien regular tus emociones -

Los ambivertidos son bastante sensatos y regulan bien sus emociones. Si te enfadas, no sueles estarlo durante mucho tiempo.

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Te sientes cómodo en diferentes grupos de amigos -

Socializas con varios grupos de amigos y aprecias lo que cada círculo te aporta.

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Eres empático -

Los ambivertidos son empáticos y a menudo ayudan a quienes los rodean. Por lo tanto, la gente suele acudir a ti en busca de consejo o de un hombro en el que apoyarse.

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No te importa hablar con desconocidos -

Puede que no seas tú quien dé el primer paso, pero no te importa hablar con desconocidos. Simplemente no sientes obligado a hacerlo.

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No te quedas hasta el final de las fiestas -

Te gusta ir a fiestas, pero no hasta las tantas. Cuando sientes que ya has tenido suficiente, te vas.

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Eres estable y constante -

Tus amigos te ven como alguien estable y tus compañeros de trabajo sienten que pueden contar contigo. No eres el centro de atención, sino que se te da bien trabajar en equipo.

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Tienes facilidad para hacer amigos -

Los extrovertidos conocen a un montón de gente y los introvertidos tienen un grupo reducido de amigos. En tu caso, tienes varios amigos cercanos y una cantidad razonable de conocidos.

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Te apuntas a un bombardeo (pero que dure poco) -

No te gustan las actividades que duran mucho tiempo. Por ejemplo, en lugar de hacer senderismo durante cinco horas, prefieres pasear una o dos con un amigo.

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No te importa ir solo a los sitios -

No te importa ir al cine o a un museo solo, pero también sabes apreciar la compañía.

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No te sientes cansado tras hablar con gente -

A muchos introvertidos les cuesta hablar con los demás, mientras que los extrovertidos no se callan ni debajo del agua. Los ambivertidos saben tener conversaciones profundas pero llevaderas.

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Tu día perfecto es una mezcla de todo -

Te gusta pasar algo de tiempo a solas tras socializar. El día perfecto para ti es aquel en el que te rodeas de tus seres queridos pero luego puedes estar a tu aire.

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Eres suave de modales -

¡Ni hablas por los codos ni pasas desapercibido!

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No te avergüenzas con facilidad - A los introvertidos no les suele gustar ser el centro de atención y a los extrovertidos les pasa justo lo contrario. En tu caso, ¡ni una cosa ni la otra!

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Puedes ser un poco escéptico con la gente -

A veces te cuesta confiar en la gente, pero otras te lanzas de lleno.

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También te gusta estar acompañado -

Aunque te guste estar solo, esto no quiere decir que no aprecies la compañía de las otras personas. Los ambivertidos siempre encuentran la forma de estar con amigos y familiares.

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Te aburres si pasas mucho tiempo sin hacer nada -

Aunque no siempre necesites estar ocupado, no tener nada que hacer te resulta aburrido. También puedes acabar perdiéndote en tus propios pensamientos.

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Te lo pasas bien en solitario -

Aunque tengas vida social, también te gusta estar a tu aire. Por ejemplo, no tienes ningún problema en salir a dar un paseo solo y quedar con amigos después.

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Necesitas desconectar -

Tras un día de socialización, solo quieres llegar a casa y estar solo. Necesitas desconectar, ya sea dándote un baño o tomándote un té en el sofá.

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Beneficios -

Como los ambivertidos suelen estar a medio camino, pueden aprovechar las cualidades de los introvertidos y los extrovertidos. Por ejemplo, les resulta más fácil comprometerse, ya que se sienten cómodos en diferentes ambientes.

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Desventajas -

Como se los considera flexibles, a veces pueden sentir la presión. El equilibrio es una buena cualidad, pero también puede ser agotadora.

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Los mejores trabajos para los ambivertidos -

Por lo general, a los ambivertidos les gusta prosperar en puestos que les permitan trabajar en equipo y tener proyectos individuales, ya que así pueden dar rienda suelta a todas sus capacidades.

Fuentes: (Parade) (Healthline) (Forbes)

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